Dayron hizo llorar a Anelhí

Emocionada. Vestirse como charro y entonar el romántico bolero 'Sabor a mí', fue suficiente para que el cubano Dayron emocione hasta las lágrimas a su esposa Anelhí, cuando la visitó de sorpresa en el set de su programa 'Gana Tv', en Arequipa.
Ambos se reencontraron en dicha ciudad después de casi dos semanas, cuando Anelhí decidió enrumbar hacia Arequipa para animar un programa de televisión, y el cubano se fue a Argentina para una gira con su grupo de cumbia.
¿Anelhí, has tenido una visita especial que te ha emocionó mucho?

Sí y ha sido una grata sorpresa, pues no sabía nada. A propósito, me han hecho llegar tarde al programa, hicieron un enlace telefónico con él y de pronto apareció en el set cantándome... en verdad, que ha sido un momento muy romántico que me emocionó totalmente.
¿Hace cuánto que no lo veías?

Casi como dos semanas y verlo así como charro e interpretando una canción tan romántica como esa, y que él sabe que me encanta, me puso la piel de gallina.
Y luego de eso, ¿qué han hecho?

Me ha llevado a almorzar a un restaurante muy elegante, y si todo sigue así, por la noche, creo que vamos a encargar el segundo hijo, ja, ja, ja.
Por su parte, Dayron comentó que la producción le pidió que llegara de incógnito a Arequipa para darle esa sorpresa, "pues yo tenía pensado verla entre jueves o viernes".
El hecho de no verla por dos semanas,¿te has puesto romántico?

La extrañaba desde el momento que nos separamos por cuestiones de trabajo. Por la música casi siempre estoy en el norte y ella en el sur, pero ahora no me importa y, si tengo que viajar más de 15 horas para verla, lo haré con gusto.
Dice Anelhí que podrían buscar la parejita de Luciana...Creo que habrá erupción en Arequipa...
Qué casualidad que sea Arequipa donde se han reencontrado con el amor, después de todo el escándalo que vivieron hace unos meses con la chica Aída, ¿no?

Hoy en día, estamos felices y vivimos con alegría. La gente aquí quiere mucho a Anelhí y los errores del pasado han quedado en el olvido. A veces, uno debe de superar ciertas vallas para crecer y hacerte más fuerte. Por eso, estamos juntos y vivimos a mil cada momento.